Si, supongo que estaréis pensando que hoy os traigo un post sobre Halloween, pero no exactamente. La verdad, es que siempre he sido muy miedosa y de disfrazarme poco así que todavía no he sucumbido a la moda, (aunque supongo que lo haré). En realidad ya lo he hecho, pero os lo contaré mañana...

Hoy os quería hablar de la tradición de los rosarios dulces. Es una tradición medieval y se ponían sobre las tumbas y en las iglesias la noche de todos los santos, con muchas velas. Luego los rosarios y panes que se solían dejar se daban para limosna. Antes estaban hechos de caramelos de piñones, frutas confitadas y "panellets" (que son unos dulces parecidos a los mazapanes). Actualmente la tradición dice que son los padrinos y las madrinas que deben regalarlo a sus ahijados y se hacen de todo tipo de caramelos y chucherías, aunque en las pastelerías todavía podemos encontrar los tradicionales. Como éstos: 

A nosotros nos encanta hacérselo a nuestros ahijados y este año mi pequeña me ha ayudado. Hemos puesto chucherías y las hemos envuelto con papel de seda y atado a un cordón rojo (baker's twine). Para terminarlo, los originales traían una "patena" (que era como lo llamábamos nosotros) que era como una medalla de fruta confitada, así que lo acabamos con una bolsa de lacasitos y una etiqueta con papel de scrap personalizándolos. Aquí os dejo unas fotos de como nos quedaron: